
Las campanas y el reloj del campanario vuelven a funcionar
En los últimos años las campanas y el reloj del campanario han dado mucho que hablar en el pueblo. El reloj ha estado averiado en los últimos años; en cuanto a las campanas, además de las incidencias relacionadas con su funcionamiento, ha habido peticiones de parte de la ciudadanía para que, al menos en la época de verano, no toquen por la noche.
El reloj y las campanas son señas de identidad de Soraluze, por lo que el ayuntamiento ha tendido la mano a los representantes de la iglesia para trabajar conjuntamente. Aunque haya pasado más tiempo del deseado, es gratificante que tanto el reloj como las campanas hayan vuelto a funcionar.
Mediante convenio, el Ayuntamiento subvencionará las reparaciones realizadas y aportará 8.603,1 €.
Solicitud para no tocar las campanas de noche en época estival
En los últimos años varios vecinos y vecinas han pedido a la iglesia las campanas que no toquen por la noche en verano. También han hecho llegar su petición al Ayuntamiento, así como al Ararteko, quien mediante escrito solicitó aclaraciones al Ayuntamiento sobre las actividades que ha realizado o piensa realizar de acuerdo con la normativa vigente, debido a las molestias ocasionadas por las campanas de la iglesia.
Por todo ello, el Ayuntamiento decidió encargar un informe técnico para esclarecer si el sonido de las campanas estaba o no dentro de lo establecido por la normativa. El estudio técnico e informe ha sido realizado por una empresa experta y para ello se han realizado mediciones sonoras en diferentes puntos de la localidad, tanto en la calle como en el interior de viviendas particulares.
Según las mediciones realizadas, el ruido producido por las campanas de la iglesia de Soraluze no cumple los valores límite establecidos en el Real Decreto 1367/2007 de la Ley 37/2003 del Ruido (procedimiento aplicable a dichas mediciones) y en el Decreto 213/2012 de la Comunidad Autónoma del País Vasco.
En consecuencia, y teniendo en cuenta los resultados de las mediciones, el Ayuntamiento solicita a los responsables de la iglesia, que se programen las campanas para que no suenen de 23:01 a 06:59 en verano. Esta propuesta aúna tanto el vínculo emocional e identitario que tenemos los y las soraluzetarras con las campanas, como el derecho a garantizar un sueño de calidad y un descanso reduciendo la influencia del ruido acústico en una época determinada.